Gambas al ajillo

¡Viva España! Pequeños sabores nos acercan a grandes momentos. Las gambas al ajillo, son un fiel ejemplo de esto. Un plato que tiene un origen muy claro, España. Con probar un simple bocado, me traslado directamente a un barco lleno de gente. Madres cuidando a sus hijos, panes con vino y cebolla. Bienvenidos a Argentina, se escucha desde lejos. Familias enteras bajan de la embarcación con baúles repletos de recuerdos y una historia que vuelve a empezar. Las gambas al ajillo se preparan en muchas cocinas, la receta se pasa de generación en generación. Algunas cosas se modifican, los ingredientes varían, pero los sentimientos se mantienen intactos. En mi casa, ese el viaje con esta comida. ¿En la tuya? Si queres experimentar y sacarte la duda conseguí gambas, ajo, pimentón, ají molido, aceite de oliva y sal. En una sartén con aceite de oliva bien caliente, colocar el ajo previamente cortado en rodajas. Luego introducir las gambas y con movimientos suaves condimentar con sal, pimentón y ají molido a gusto. Dejar cocinar unos minutos y disfrutar del plato directamente desde la sartén para mantener su temperatura. Si hay un momento para sumergir el pan en el aceite, es este.