Escocia
Scones de Queso
Ingredientes:
Harina leudante, 210 g
Mostaza 1 cdita (opcional)
Sal a gusto
Manteca, 40 g
Queso hebras o rallado, 100 g
Leche o crema, 100 cc
Polvo para hornear 1 cdita
Con estos triángulos llenos de sabor vamos a viajar a Escocia, que es donde dieron origen a estas bellezas.
El nombre “scone” se relaciona con “La piedra del destino” (The Stone of Destiny). Y es lógico que con ese título encontremos una gran historia detrás. Se dice que las tribus del norte de Escocia vieron impactar una gran roca sobre las llanuras, provocando que las mismas se conviertan en acantilados. Para la tribu, ese evento fue una señal profética de un nuevo imperio. Caminaron hacia el lugar y guardaron una piedra como una especie de tesoro. La bautizaron “piedra del destino”. ¿Pueden creer que esta pieza fue heredada por generaciones a través de los siglos? Me pregunto dónde estará ahora.
Casi que me olvido de los scones. Aquí viene lo realmente importante. El cuento continúa cuando un joven repostero refugiado en la Abadía de Scone recordó esa famosa piedra y, para honrarla, preparó unos panecillos con una forma que no era propiamente circular –como la podemos ver hoy en la mayoría de las recetas– sino más bien irregular, como un triángulo. Luego de cocinarlos decidió nombrarlos “scones”. ¡Wow!. Con una simple palabra estamos contando toda una historia.
La receta que hice en esta oportunidad es de @esteficolombo, por lo que los invito a que vean su perfil y la hagan. Realmente es muy fácil. Les aseguro que es un viaje de ida. Creo que nos quedaremos un tiempo por Escocia.
Me voy a comer esta delicia mientras reservo los pasajes para el próximo destino.
El nombre “scone” se relaciona con “La piedra del destino” (The Stone of Destiny). Y es lógico que con ese título encontremos una gran historia detrás. Se dice que las tribus del norte de Escocia vieron impactar una gran roca sobre las llanuras, provocando que las mismas se conviertan en acantilados. Para la tribu, ese evento fue una señal profética de un nuevo imperio. Caminaron hacia el lugar y guardaron una piedra como una especie de tesoro. La bautizaron “piedra del destino”. ¿Pueden creer que esta pieza fue heredada por generaciones a través de los siglos? Me pregunto dónde estará ahora.
Casi que me olvido de los scones. Aquí viene lo realmente importante. El cuento continúa cuando un joven repostero refugiado en la Abadía de Scone recordó esa famosa piedra y, para honrarla, preparó unos panecillos con una forma que no era propiamente circular –como la podemos ver hoy en la mayoría de las recetas– sino más bien irregular, como un triángulo. Luego de cocinarlos decidió nombrarlos “scones”. ¡Wow!. Con una simple palabra estamos contando toda una historia.
La receta que hice en esta oportunidad es de @esteficolombo, por lo que los invito a que vean su perfil y la hagan. Realmente es muy fácil. Les aseguro que es un viaje de ida. Creo que nos quedaremos un tiempo por Escocia.
Me voy a comer esta delicia mientras reservo los pasajes para el próximo destino.